¿Qué hace más daño: fumar o consumir comida chatarra? La respuesta la da este estudio

La comida chatarra es nociva como el tabaquismo, pero si las comparáramos ¿cuál sería peor? La respuesta se halla en un estudio realizado recientemente.

Es algo de todos conocidos que tanto el hábito de fumar como una dieta basada en comida chatarra tiene consecuencias perniciosas para nuestro cuerpo. Éste, al verse afectado de tal manera, paulatinamente comienza a darnos aviso de sus transformaciones negativas, y si no le prestamos atención a su debido tiempo, es probable que el daño sea irreversible.

(Foto: fuente web)

Las enfermedades cardiovasculares en general y las hepáticas son el resultado común que producen el tabaquismo y el consumo de comida chatarra. Ahora bien, la pregunta es cuál de estos malos hábitos genera más perjuicios. A partir de un estudio llevado a cabo en Australia es posible responderla de manera definitiva, y aquí te mostramos cuáles fueron los resultados.

Tabaquismo vs mala alimentación: ¿cuál produce más daño?

Según la investigación que referimos recién, ambos hábitos, fumar en exceso y llevar una dieta basada en comida chatarra generan el mismo impacto en nuestro organismo. Como sabemos, la lucha contra el tabaco se viene librando hace muchos años, y la concientización realizada por diversos medios, como las advertencias en los paquetes, permitió que mucha gente abandonara el cigarrillo.

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Pero, por desgracia, la mala alimentación no ha corrido una suerte pareja, pues las campañas para combatirla se han visto frecuentemente entorpecidas, entre otras cosas, por los grandes empresas de alimentos, quienes, lejos de concientizar, producen cada vez más comida chatarra y la publicitan cada vez mejor, promoviendo así su consumo excesivo, algo que es tan pernicioso como el tabaquismo. La obesidad se ha convertido, asimismo en una gran problema mundial, y cada vez son más quienes la padecen.

A partir de los datos recabados por la investigación fue posible determinar que el número de muertes causadas por la obesidad a nivel mundial ha sido superior al del año pasado, en concreto, hubo diez millones más. Tanto la facilidad para comprar comida chatarra gracias a la tecnología, como el bombardeo de publicidad empujan sin cesar a las personas a pensar que la comida chatarra es algo bueno, y por lo tanto el consumo no para de crecer. El límite que deberían establecer los gobiernos, tal como lo hicieron con el tabaco, todavía no ha tenido ningún impacto en esta cuestión.

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