Finalmente, la respuesta sobre si el hombre es multitasking. Parece que hay diferencias importantes, pero también hay novedades para todos.
Siempre es fascinante descubrir más sobre la naturaleza de nuestra especie, aparte de que el choque hombre/mujer ha llevado, por lo general, siempre a estas conclusiones. La creencia es que el hombre no es multitasking y que siempre debe concentrarse en una cosa por vez. Si este es el caso, es necesaria una explicación. Veamos cuál es, paso a paso.
Hay muchas mujeres y hombres exitosos. Ya estamos en posición de decir que no existen profesiones exclusivas del género y ambos pueden ocupar los mismos puestos sin tener que andar replicando estereotipos obsoletos.
El estudio que queremos presentarte se aleja completamente de aspectos discriminatorios. Es un estudio que intenta describir la forma en que se hacen las cosas. Pero es simplemente un indicio de la gran belleza cultural.
Gracias a la historia, una vez más, encontramos las razones.
La verdad sale a flote: ¿El hombre es o no multitasking?
La razón por la cual el hombre no es multitasking no está dada por nuestro presente, sino, en realidad, por un pasado tan remoto que solo está presente en nuestros genes.
No es porque sea inferior que el hombre no es multitasking. Hay una cuestión de estrés cerebral presente en el hombre que aqueja cuando éstos pretenden llevar a cabo más acciones de las que se esperaban, en especial si son muy diferentes.
Bajo la dirección de la profesora Svetlana Kuptsovaofla, la Escuela Superior de Economía de Moscú realizó estudios en neurolingüística con hombres y mujeres de 25 a 65 años. Según el estudio, las mujeres han respondido ser capaces de realizar varias tareas distintas con mayor naturalidad.
La razón de esto es que el hombre usa extensivamente un área del cerebro dedicada a la gestión espacial. Esto viene dado desde la Prehistoria donde la única meta era cazar. Esa disposición ha sido tan arraigada que llega hasta nuestros tiempos y está bien presente en el ADN humano. Por otro lado, la condición de la mujer de llevar a cabo varias actividades en simultáneo, se remonta a la Edad de Piedra.
La conclusión, luego de haber escaneado 140 cerebros, es que el hombre ha tenido una evolución diferente al de la mujer. En situaciones de mucho estrés es el género femenino el que responde mejor y prevalece.
Para casos de mismos análisis –números y formas-, en ambos se hace uso de la corteza prefrontal dorsal-lateral dedicada a la memoria y el razonamiento.
Sin embargo, hay una diferencia que se encuentra en la actividad cerebral masculina. Se hace un mayor esfuerzo en ciertas partes del cerebro que ni siquiera se encienden en las mujeres. Esta es una condición de diferente abordaje.
En definitiva, si un hombre quiere realizar más tareas debe esforzarse más.