Los caballitos de mar pigmeos miden solo entre 1,5 y 2,5 centímetros. Además, son unos verdaderos maestros del camuflaje.
Los caballitos de mar pigmeos son una de las especies de hipocampos más pequeña. Para que te hagas una idea, tienen el tamaño de un clip con el que sujetas hojas en casa. Sí, apenas pasan los dos centímetros.
La especie más común es la Hippocampus bargibanti, pero existen otras ocho. Una de ellas, la Hippocampus pontohi, fue descubierta en 2020. Eso sí, todas se encuentran en la región conocida como el Triángulo de Coral, en el sudeste asiático (incluye países como Filipinas, Japón o Indonesia).
Su hábitat marino preferido son los arrecifes de coral anaranjados o púrpuras. Allí se alimentan de copépodos, diminutos crustáceos que forman parte del zooplancton.
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Su asombrosa capacidad para camuflarse
Siendo una criatura tan pequeñita conviviendo con grandes predadores en la inmensidad del mar, el caballito de mar pigmeo ha desarrollado una increíble capacidad para camuflarse. Así, logra pasar desapercibido y sobrevivir.
¿Cómo lo hace? Pues adaptando su color al del coral donde vivirán toda su vida adulta. Esto no se supo hasta hace poco tiempo gracias a investigadores de la Universidad de California; antes se pensaba que elegían el coral según su propio color.
Los científicos pudieron observar que ciertos caballitos de mar recién nacidos, de color marrón, adquirían el color del coral que tenían cerca. Además, les crecieron unos pequeños bultos que los ayudaban a imitar perfectamente la textura del coral.
Para descubrir desde más acerca esta fascinante habilidad de nuestros caballitos de mar pigmeos, no te pierdas este video.
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